sábado, 31 de octubre de 2009

Una demostración implacable

El último libro de Salim Lamrani

Ramón Chao
Rebelión

Lo que los medios de comunicación no les dirán nunca sobre Cuba, lo descubrirán en el último libro de Salim Lamrani, que lleva un título similar: Cuba. Ce que les médias ne vous diront jamais. Los medios no le darán la difusión que merece, pues Lamrani señala con minuciosidad las graves tergiversaciones de los medios occidentales en su tratamiento de la información sobre este asunto.

Con rigor científico, Lamrani muestra la profundidad del abismo que separa la imagen mediática de Cuba y la realidad de ese país. Todo se aborda: derechos humanos, disidencia, emigración, libertad de expresión. Para ello, Lamrani no entra en consideraciones políticas o ideológicas, sólo se basa en los hechos y pone a los medios occidentales frente a sus propias contradicciones. Las fuentes utilizadas no son confidenciales, son públicas y están disponibles, pero cuidadosamente ignoradas por la prensa.

La demostración es implacable. Lamrani pone al lector frente una realidad indiscutible y le deja sacar sus propias conclusiones. La lista es larga y la lectura instructiva. Entendemos mejor por qué es difícil encontrar reseñas del libro en la prensa.


*Periodista y escritor, antiguo director de la información en Radio France International, Ramón Chao es además el padre del famoso cantante Manu Chao.

Salim Lamrani

Cuba. Ce que les médias ne vous diront jamais

Prólogo de Nelson Mandela

Paris, Editions Estrella, 2009

300 páginas

18€

Disponible en Amazon : http://www.amazon.fr/Cuba-Medias-Vous-Diront-Jamais/dp/2953128417/ref=pd_rhf_p_t_1

Para cualquier pedido de un libro dedicado, sírvanse escribir a: lamranisalim@yahoo.fr

El martirio del Sáhara Occidental

reseña de la obra del autor nigeriano Ike Abonyi
Sola Balogun
The Sun News Online

Traducción del inglés para Rebelión por Atenea Acevedo

Para la mayoría de la población nigeriana las palabras “Sáhara Occidental” evocan el desierto del Sáhara. Son pocas las personas de Nigeria (y de África en general) que saben de la existencia de un país de nuestro continente llamado Sáhara Occidental. Tal vez no lo sepan porque ese país está sometido a las cadenas que le ha impuesto Marruecos.

En efecto, en estos tiempos hay un país que sigue sufriendo la opresión de otro. Peor aún, se trata de dos países africanos. La República Árabe Saharaui Democrática (su gentilicio es saharaui) es una ex colonia española rica en recursos minerales como fosfatos y con una de las más grandes reservas de pesca en el mundo. Actualmente se exploran sus recursos petrolíferos submarinos.

Cuando España se retiró de su entonces colonia en 1975 dejó inconcluso el proceso de descolonización y Marruecos, vecino del Sáhara, de inmediato invadió y tomó posesión del territorio. Mauritania también tomó parte de las tierras saharauis, pero no tardó en firmar la paz y devolver las tierras al Frente Polisario, movimiento político que continuó la guerra con Marruecos.

Africa’s Last Colony: Spain’s Error, Morocco’s Sin (La última colonia africana: el error de España, el crimen de Marruecos) describe atinadamente la situación y las atroces circunstancias que marcan la vida del pueblo saharaui: agua envenenada, tortura, desapariciones forzosas y otras aberraciones.

El libro recoge la experiencia del autor, Ike Abonyi, que visitó la República Árabe Saharaui Democrática. En la introducción, Abonyi lamenta que una historia tan emotiva como la de este país sea desconocida o ignorada por el resto del mundo. La obra está dividida en tres partes y refleja una escritura sencilla y accesible. El título completo es muy acertado: Africa’s Last Colony: Spain’s Error, Morocco’s Sin; An African Journalist’s Diary On Western Sahara (La última colonia africana: el error de España, el crimen de Marruecos. Diario de un periodista africano en el Sáhara Occidental).

El prólogo es del profesor Nuhu Yaqub, quien recientemente dejó el cargo de vicerrector de la Universidad de Abuja, y se refiere al libro como una obra que oportunamente se suma a la literatura sobre la descolonización africana. Yaqub también subraya el hecho de que muchas personas africanas, aun cuando sean progresistas o tengan educación formal, desconocen la existencia de un país llamado República Árabe Saharaui Democrática, ya no digamos su lucha por la independencia de Marruecos.

En su prólogo, Yaqub denuncia la hipocresía de aquellos países occidentales que se jactan de respetar los derechos humanos (Francia, Alemania y España) al tiempo que hacen la vista gorda a las flagrantes violaciones de derechos humanos que comete Marruecos. Señala, además, que Nigeria tiene el deber, como Estado africano, de apoyar al Sáhara Occidental en la recuperación de su independencia.

La primera parte del libro resume la historia del Sáhara Occidental como colonia de España, la retirada de este país y la invasión marroquí y mauritana. Explica también la forma en que Mauritania devolvió los territorios que había tomado al tiempo que Marruecos se empecinó en mantener los territorios ocupados.

Abonyi, al igual que otros analistas, culpa a España por no realizar un proceso de descolonización, es decir, por no pasar el mando al Frente Polisario, grupo político fundado en 1973 para terminar con la colonia española.

A pesar de que en 1975 el Tribunal Internacional de Justicia resolvió que el Sáhara Occidental era un país independiente al momento de la colonización española y que su soberanía pertenecía a su pueblo, Marruecos rehusó la retirada de los territorios ocupados y la guerra con el Frente Polisario continuó. En 1991 la ONU negoció un alto al fuego y aprobó un referendo de autodeterminación del pueblo saharaui, pero Marruecos ha obstaculizado su concreción.

Más de 150,000 saharauis son personas refugiadas, otras son desplazadas dentro de su propio país. Viven gracias a una ración diaria del Programa Mundial de Alimentos de la ONU o son acosadas y detenidas sin proceso legal, o forzadas al exilio.

En la segunda parte del libro, Abonyi relata su experiencia de viaje al Sáhara. Como invitado de la presidencia, durmió en un colchón de seis pulgadas de grosor, algo común en los internados de Nigeria. Pudo ver que el campamento había disfrutado de cierta paz en los últimos 17 años, pero también fue testigo de la desilusión de gran parte de la juventud saharaui, sobre todo ante la política marroquí de explotación unilateral de recursos e indiferencia total a las necesidades del pueblo saharaui.

El relato de Abonyi despertará indudablemente nuestra empatía al narrar la forma en que jóvenes saharauis han perdido algún miembro o incluso la vida debido al estallido de las minas que Marruecos ha colocado a lo largo del muro de 2,500 kilómetros que levantó en el Sáhara Occidental Ocupado. Asimismo, relata terribles detalles de la vida de 140 personas que reciben tratamiento en el Centro de Rehabilitación para Víctimas de Guerra y Minas en la sede administrativa de los campamentos saharauis.

La tercera parte de Africa’s Last Colony es una colección de entrevistas con dignatarios del gobierno saharaui. En una conversación con Abonyi, el presidente Mohammed Abdulaziz elogia la actitud de Nigeria hacia otros países africanos y su liderazgo en el continente. Destacan también las entrevistas con Mohamed Salem, comandante de la escuela militar saharaui, y Mohammed Yeslem Beisat, ministro para África.

El autor plantea preguntas de suma importancia: ¿Por qué España no llevó a cabo un proceso total de descolonización en el que se pasara el mando al Frente Polisario? ¿Por qué el hecho de compartir religión, idioma y geografía no ayuda a resolver el problema entre Marruecos y el Sáhara Occidental? ¿Quién fabrica y suministra las armas que usa Marruecos para aterrorizar a la población saharaui? ¿Qué otros países se benefician de la explotación marroquí del Sáhara Occidental? ¿Cuál es el papel de Francia, potencia ex colonizadora de Marruecos, en esta situación?

Hay otras preguntas que exigen respuestas: ¿Por qué el resto del mundo árabe se torna indiferente a la opresión de un ‘pueblo hermano’? ¿Cuánta presión ejercen sobre Marruecos la Unión Africana y otros organismos regionales que reconocen al Sáhara Occidental como Estado soberano?

La última colonia africana pone sobre la mesa una situación real y lamentable: mientras otros pueblos han transitado a la discusión de problemas internos relacionados con cuestiones étnicas y de nepotismo, entre otras, un gobierno africano sigue arrebatando a un pueblo africano el derecho a la autodeterminación. Lo más abyecto de este hecho es que hay soldados que torturan y matan saharauis, sin distinción de edad ni sexo, en una guerra soterrada.

Fuente: http://www.sunnewsonline.com/webpages/features/arts/2009/oct/27/arts-27-10-20

domingo, 18 de octubre de 2009

Latinoamericanismo vs. imperialismo, de Fidel Castro

Ocean Sur: Novedad editorial
(Selección, prólogo y notas de Luis Suárez Salazar)

El ideario de Fidel Castro sobre América Latina, inseparable de su proyección antiimperialista y anticolonialista, es el hilo conductor de esta antología.

El lector podrá acceder al pensamiento sistémico y vivo de uno de los más relevantes líderes de las luchas de los pueblos del Tercer Mundo; un cuerpo conceptual que continúa y profundiza una tradición latinoamericana cuyos referentes fundacionales se asientan en Simón Bolívar y José Martí, y se enriquecen a través del diálogo con los contextos y realidades contemporáneas de Nuestra América.

CONTENIDO

Prólogo

El triunfo de la Revolución cubana interesa no solo a Cuba, sino a toda la América Latina

Discurso pronunciado el 5 de mayo de 1959 en la explanada de Montevideo, capital de la República Oriental del Uruguay

Latinoamericanismo vs. Panamericanismo

Discurso pronunciado el 2 de septiembre de 1960 en el masivo acto donde se aprobó la Primera Declaración de La Habana

El deber de los revolucionarios latinoamericanos es hacer la Revolución

Discurso pronunciado el 4 de febrero de 1962 en la multitudinaria concentración donde se aprobó la Segunda Declaración de La Habana

La ayuda de Cuba a los movimientos revolucionarios no puede ser negociada con los Estados Unidos

Discurso pronunciado el 26 de julio de 1964 en el que se aprobó la Declaración de Santiago de Cuba

Si las ideas revolucionarias son derrotadas, la revolución en América Latina se dilataría indefinidamente

Discurso pronunciado en la clausura de la Primera Conferencia de la Organización Latinoamericana de Solidaridad

¡Nos mantendremos aquí firmes, erguidos, enarbolando nuestras ideas,

hasta que el último pueblo latinoamericano se haya liberado!

Discurso pronunciado el 26 de julio de 1971

El fracaso de la OEA es ya irrebatible

Informe Central al Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba

Son insalvables las contradicciones entre el imperialismo norteamericano

y los países de América Latina y el Caribe

Informe Central al Segundo Congreso del Partido Comunista de Cuba

La conciencia unitaria latinoamericana y caribeña se va abriendo paso

Informe Central al Tercer Congreso del Partido Comunista de Cuba

Salvar la patria, la revolución y el socialismo es nuestra mayor responsabilidad con los pueblos de nuestra América

Discurso pronunciado durante la inauguración del Cuarto Congreso del Partido Comunista de Cuba

Es deber de la izquierda crear conciencia de la necesidad de la integración y de la unión de América Latina y el Caribe

Discurso pronunciado en la clausura del Cuarto Encuentro del Foro de São Paulo, realizado en Cuba en julio de 1993

América Latina y el Caribe podrán ser devorados, pero no digeridos por el decadente imperialismo estadounidense

Alocución pronunciada en Tribuna Abierta del Primero de mayo de 2001

Nadie podrá impedir el futuro luminoso de los pueblos de América Latina y el Caribe

Discurso pronunciado el 3 de febrero de 2006 en ocasión de la entrega a Hugo Chávez por parte de la UNESCO del Premio Internacional “José Martí”

Epílogo: En nuestra América se producirán nuevas revoluciones

Notas



PRÓLOGO

Dr. Luis Suárez Salazar

En su artículo «El tercer año del Partido Revolucionario Cubano: El alma de la Revolución, y el deber de Cuba en América», publicado en el periódico Patria el 17 de abril de 1894, José Martí, Apóstol de la Independencia de Cuba, indicó:

Un error en Cuba, es un error en América, es un error en la humanidad moderna. Quien se levanta hoy en Cuba se levanta por todos los tiempos. Ella, la santa patria, impone singular reflexión; y su servicio, en hora tan gloriosa y difícil, llena de dignidad y majestad. Este deber insigne, con fuerza de corazón que nos fortalece, como perenne astro nos guía, y como luz de permanente aviso saldrá de nuestras tumbas. Con reverencia sin­gular se ha de poner mano en problema de tanto alcance, y honor tanto. Con esa reverencia entra en su tercer año de vida, compasiva y segura, el Partido Revolucionario Cubano, convencido de que la independencia de Cuba y Puerto Rico no es sólo el medio único de asegurar el bienestar de­coroso del hombre libre en el trabajo justo a los habitantes de ambas islas, sino el suceso histórico indispensable para salvar la independencia ame­nazada de las Antillas libres, la independencia amenazada de la América libre, y la dignidad de la república norteamericana. ¡Los flojos, respeten: los grandes adelante! Esta es tarea de grandes.

Antes y después de su caída en combate el 19 de mayo de 1895, ese llamado guió las diversas luchas por la independencia frente al coloniaje español des­plegadas hasta mediados de 1898 por el pueblo cubano y, en particular, por su cada vez más potente Ejército Libertador. No obstante, en abril de ese año, sin consultar con las autoridades del Consejo de Gobierno de la República de Cuba en Armas, el presidente estadounidense William McKinley (1897-1901), con el respaldo del Congreso, tomó la decisión de que las fuerzas armadas intervinieran en la ya virtualmente victoriosa tercera guerra por la liberación nacional del pueblo cubano, iniciada el 24 de febrero de 1895 bajo la conduc­ción de José Martí, Máximo Gómez y Antonio Maceo.

Como el Protocolo de Paz de agosto 1898 y el Tratado de París de di­ciembre del mismo año (signados entre el gobierno de los Estados Unidos y la derrotada y revanchista monarquía española, sin la presencia de las fuerzas libertadoras cubanas, filipinas y portorriqueñas), al igual que la amañada Constitución de la República de Cuba de 1901 —con el apéndice impuesto manu militari por el gobierno de los Estados Unidos mediante la célebre Enmienda Platt— frustraron temporalmente las añejas aspiracio­nes independentistas del pueblo cubano, el legado martiano —salido como luz de permanente aviso de su tumba— se asumió como estandarte por todos los genuinos revolucionarios cubanos que durante la primera mitad del siglo XX lucharon contra el orden neocolonial impuesto, así como contra todas las dictaduras militares, cívico-militares o las corruptas democracias repre­sentativas que mal gobernaron a la mayor de las Antillas a partir del 20 de mayo de 1902. Esas luchas siempre estuvieron intrínsecamente unidas a las batallas antiimperialistas y anticolonialistas, y por la democracia, la libera­ción nacional y social que se desarrollaban en todo el mundo y, en particu­lar en las demás naciones de América Latina y el Caribe.

Tal herencia sería recogida y enriquecida por la Generación del Centenario del natalicio de José Martí (28 de enero de 1953) y, sobre todo, por los y las que luego del frustrado asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes (26 de julio de 1953), fundaron en 1955 el Movimiento 26 de Julio (M-26-7). Siguiendo lo planteado por su fundador y máximo di­rigente, Fidel Castro, en su célebre alegato conocido como La Historia me absolverá, en el programa de esa organización político-militar quedó latente la idea de que cuando triunfara la Revolución:

[L]a política cubana en América sería de estrecha solidaridad con los pue­blos democráticos del continente […] los perseguidos políticos de las sangrientas dictaduras que oprimen a la naciones hermanas, encontrarían en la patria de Martí […] asilo generoso, hermandad y pan [ya que] Cuba debía ser baluarte de libertad y no eslabón vergonzoso de despotismo.

Ese propósito también guió al Ejército Rebelde. Luego de extender la guerra revolucionaria a todo el país y estrechamente unido a las células urbanas del M-26-7, y a los destacamentos más consecuentes del Partido Socialista Popular (comunista) y del Directorio Revolucionario 13 de marzo —funda­do por el desaparecido dirigente estudiantil José Antonio Echeverría—, en la madrugada del primero de enero de 1959 derrocó a la dictadura del ge­neral Fulgencio Batista, instaurada el 10 de marzo de 1952 con el consistente apoyo político, económico y militar de los grupos de poder y de las admi­nistraciones estadounidenses, encabezadas por el demócrata Harry Truman (1945-1953) y el republicano Dwight Eisenhower (1953-1961).

Estaba en la lógica de la historia y de los acontecimientos que los he­chos revolucionarios cubanos encontrarían inmediatamente la hostilidad de los sectores dominantes en esa potencia imperialista. Asimismo, la estrecha imbricación entre las luchas por la democracia, por la liberación nacional y social, así como por la construcción del socialismo emprendida desde enton­ces hasta hoy por el pueblo cubano con las luchas de los pueblos de Nuestra América por lograr la que en 1889 José Martí había definido como «su se­gunda independencia» frente al entonces naciente imperialismo estadouni­dense.

Al margen de los diferentes cargos políticos y estatales que ha ocupa­do desde el primero de enero de 1959 hasta la actualidad; artífice, conduc­tor, teórico y a la vez cronista de esa imbricación, al igual que calificado analista del cambiante contexto internacional y hemisférico en que esta se ha desarrollado, ha sido el máximo líder del pueblo cubano, Fidel Castro. De ahí la validez e importancia de este volumen en el que bajo el título Latinoamericanismo vs. Imperialismo, aparece una compilación anotada de tre­ce discursos en los que ha abordado la historia y la situación de América Latina y el Caribe, al igual que sus siempre dialécticas y antidogmáticas aproximaciones al programa, la estrategia y la táctica de las luchas antiim­perialistas y antioligárquicas que se han desplegado en ese vasto espacio geográfico, cultural y humano que en 1953, siguiendo a José Martí, el enton­ces joven estudiante de medicina Ernesto Guevara de la Serna llamó «nues­tra Mayúscula América».

Obviamente, en esta selección también aparecen múltiples referencias a la historia de las luchas del pueblo cubano, y en particular a su tenaz y hasta ahora exitoso enfrentamiento a las diversas estrategias agresivas des­plegadas por las diez administraciones demócratas y republicanas que han ocupado la Casa Blanca desde 1953 hasta la actualidad, ya que, de hecho, en los últimos cuarenta y ocho años siempre ha existido una correlación diná­mica entre la trayectoria de la transición socialista cubana, las multifacéticas agresiones contra ella desplegadas por los grupos de poder estadouniden­ses y el desarrollo de las luchas por la verdadera independencia de América Latina y el Caribe. Esa correlación ha condicionado, de una u otra forma, la política hacia Cuba implementada por los gobiernos de los treinta y dos es­tados independientes o formalmente independientes que hoy existen en ese continente y, por tanto, la conducta que hacia ellos ha mantenido, en cada momento histórico, el liderazgo político y estatal de la Revolución cubana.

Como aquí se verá, cada uno de los discursos y escritos seleccionados son antecedidos por una breve introducción del compilador con el objeti­vo de presentar el contexto internacional, hemisférico o cubano en el que fueron pronunciados. Con ello se persigue evitar, por sobre todas las cosas, una lectura dogmática y escolástica del profundo, creador y dialéctico pen­samiento del líder de la Revolución cubana.

Los lectores encontrarán algunas repeticiones entre los discursos inclui­dos en esta obra. A pesar de que en la edición se trató de disminuirlas al mínimo, no siempre resultó posible hacerlo, ya que se corría el inadmisible riego de destruir la consistencia y la coherencia intrínseca del pensamiento de Fidel Castro.

Por otra parte, el espacio disponible impide publicar otros importantes discursos del líder de la Revolución cubana, sobre todo los pronunciados en las cerca de sesenta visitas de diferente carácter que ha realizado a vein­tiún países de América Latina y el Caribe desde el triunfo de la Revolución hasta hoy. Algunos fueron preservados para empeños editoriales posterio­res, como los referidos a las estrechas relaciones cubanas con las naciones angloparlantes integrantes de la Comunidad del Caribe (CARICOM). Otros fueron incluidos en el volumen Las crisis de América Latina: diagnósticos y so­luciones.

Sin embargo, a mi juicio la selección que aparece en esta obra refleja de una manera bastante integral la evolución del pensamiento de Fidel Castro, uno de los más relevantes líderes de las luchas antiimperialistas y anticolo­nialistas de los pueblos del Tercer Mundo y, en particular, de los pueblos de nuestra Mayúscula América. Y de quien ahora y siempre habrá que decir lo que José Martí escribió respecto a los que llamó «tres héroes» de las lu­chas por la primera independencia de la América española: «Los hombres no pueden ser más perfectos que el sol. El sol quema con la misma luz con que calienta. El sol tiene manchas. Los desagradecidos no hablan más que de las manchas. Los agradecidos hablan de la luz». Y agregó: «esos hombres que hacen pueblos son como más que hombres. […] Esos son héroes; los que pelean para hacer a los pueblos libres…».

Latinoamericanismo vs. imperialismo
Ocean Sur, 2009)

Más información sobre este libro en:

http://www.oceansur.com/product/latinoamericanismo-vs-imperialismo/

jueves, 15 de octubre de 2009

La vida es tan corta, y son tantos los libros

Carlos Sánchez Almeida
Kriptópolis

- ¿Es Internet la Biblioteca de Alejandría actual?

Sí, desde luego que Internet es el equivalente a Alejandría y su Biblioteca. Se calcula que con la quema de los papiros de la primera Biblioteca de Alejandría se perdieron tres cuartas partes del conocimiento de la época... a veces me pregunto qué es lo que provocaría la caída de Internet.

- ¿Alguna teoría?

No, la verdad es que no se me ocurre qué podría ocurrir para destruir ese gran universo.

-- Alejandro Amenábar, en una entrevista

Nada expande tanto la conciencia como la convicción en la inevitabilidad de la muerte. Desde su primer cortometraje, todas las obras de Amenábar han girado sobre el mismo tema, su particular obsesión: la muerte física. Pero le han hecho falta unos cuantos años para conseguir una perspectiva más amplia; es lo que tiene hacerse rico: mientras lo estás intentando, tus perspectivas son mucho más reducidas...

Lo dijo Kavafis: en el largo camino hacia Ítaca, siempre se vuelve a Alejandría. Y antes o después, el viajero abre los ojos para entender el mensaje del cojo inmortal:

Retirado en la paz de estos desiertos, con pocos, pero doctos libros juntos, vivo en conversación con los difuntos, y escucho con mis ojos a los muertos.

¿Qué puede destruir Internet? Todo depende del concepto que cada uno tenga de la Red. Pero para los que desde hace muchos años la hemos visto como una inmensa biblioteca, existe una amenaza mucho mayor que la de los parásitos del papel. Y esa amenaza se llama copyright.

Sin libertad de copia nunca hubiese existido la Biblioteca de Alejandría. Cuenta Simon Singh en "El enigma de Fermat" cómo se confiscaban todos los libros de los barcos que atracaban en el puerto de Alejandría, de forma que pudiesen ser copiados por los bibliotecarios. El original iba a la biblioteca, y la copia era embarcada de nuevo, para ponerla a salvo de los incendios y de la intolerancia.

Internet fue durante mucho tiempo un océano poco profundo, con mucha información sobre la actualidad, pero escaso fondo bibliográfico: los libros seguían en manos de las editoriales. Poco a poco, el trabajo constante de miles de manos anónimas han traído al océano la posibilidad de una isla. Una isla en la que salvar a millones de libros de las garras del copyright.

La codicia ciega a los editores, y empiezan a cometer el mismo error que en su día cometieron los magnates de la industria discográfica: insultar al público. En breve cometerán el segundo error, inundando el mercado con obras mutiladas con medios anticopia, en la vana esperanza de domesticar a los lectores mediante sistemas DRM.

Carpe Diem, no perdamos el tiempo. Mientras ellos discuten sobre el sexo de los ángeles, nosotros tenemos mucho trabajo por delante. Con o sin Google, hay que conseguir que todo el patrimonio bibliográfico de la humanidad esté disponible gratuitamente en Internet. Quizás puedan domesticar el futuro, pero jamás podrán quitarnos lo que ya está escrito.

Confieso que me he resistido durante mucho tiempo a dejar el papel: los lectores tenemos una relación cuasi fetichista con nuestros libros favoritos. Pero qué quieren que les diga, la carne es débil: desde que me compré mi lector de e-books no he vuelto a cargar con un solo libro en papel.

Lo que digitalicemos ahora, será nuestro para siempre, y lo será para nuestros hijos. Sólo necesitamos lectores libres, en los que almacenar víveres para los tiempos de resistencia que se avecinan. Mi consejo es que busquen, comparen y compren el más barato, que soporte más formatos y con mayor duración de batería. Y llenen cuanto antes su tarjeta de memoria, para poderla intercambiar con su vecino si algún día nos queman Internet.

Aprendan cuanto antes lo que tanto tiempo le ha costado entender a Amenábar: nunca tendremos suficiente vida para leerlo todo.

Enlaces necesarios
http://www.quedelibros.com
http://papyre.co.cc
http://www.elultimolibro.net/
http://todoebooks.blogspot.com/
http://www.bibliotheka.org/?/inicio/
http://www.kriptopolis.org/libro-electronico-ebook

miércoles, 14 de octubre de 2009

"Costa Nostra. Las mafias en la Costa del Sol"

Reseña del libro "Costa Nostra. Las mafias en la Costa del Sol"
Cómo saber quienes son los dueños del mundo

Pascual Serrano
Rebelión

Mucho se habla de los paraísos fiscales. Todo el mundo reniega de ellos y se considera probado que sus negocios se emplean para financiar el crimen organizado, pero ahí continúan. El libro “Costa Nostra. Las mafias en la Costal del Sol” (Editorial Atrapasueños), del periodista Miguel Díez Herrera y el político de Izquierda Unida Antonio Romero, ambos malagueños, nos ayuda a comprender los poderosos intereses que impiden que los gobiernos actúen contra esos santuarios económicos del crimen.

Ante la pasividad de los dirigentes políticos en las dos últimas décadas se ha multiplicado por cinco el dinero resguardado en los 74 puntos considerados paraísos fiscales repartidos en los cinco continentes, en total siete billones e dólares, un 13 por ciento del PIB mundial, un fraude fiscal cifrado en unos 255.000 millones de dólares. Algunos de estos paraísos se encuentran muy cerca, por ejemplo en Gibraltar, que con 30.000 habitantes cuenta con más de 80.000 sociedades mercantiles registradas. Según el FMI, anualmente se blanquean en estos paraísos 1'5 billones de dólares procedentes de actividades con bandas criminales organizadas, fraude fiscal y corrupción. Todo ello mediante tres millones de sociedades y fundaciones a través de las cuales las organizaciones criminales, las grandes empresas, las multinacionales, la banca y las grandes fortunas personales ocultan su contabilidad, burlan el pago de impuestos y blanquean dinero negro. Se estima que, sólo en lo referente a las grandes multinacionales de Estados Unidos, un 31 % de sus beneficios netos se esconde en paraísos fiscales. La Red de Justicia Global llama la atención sobre el hecho de que en 1950 las grandes corporaciones norteamericanas representaban el 28 % de los ingresos federales y en la actualidad no alcanzan el 11. El fraude al Tesoro norteamericano lo cifra la CIA entre 70.000 y 100.000 millones de dólares al año. Según han denunciado las federaciones internacionales de sindicatos, de las 275 empresas más grandes de Estados Unidos, 82 no pagaron impuestos entre 2001 y 2003.

Díez y Romero destacan que lo importante es saber que esa economía de criminales está íntimamente ligada a la economía legal. Un cártel de la droga, por ejemplo, necesita contar un abanico de sociedades y cuentas bancarias para operar, y con ellos todo un plantel de industriales, intermediarios, abogados, financieros, etc... con apariencia de honrados. Así encontramos que tres de los colosos de la banca mundial, el Citigroup, Royal Bank of Scotland y Lloyds Banck, cuentan con una legión de sociedades opacas.

La Unión Europea estima que de ponerse fin a la actividad del narcotráfico el volumen de la economía de Estados Unidos descendería entre un 19 % y un 22 %. Es lógico por tanto comprender la escasa voluntad de las autoridades económicas y políticas en actuar contra los paraísos fiscales. El caso español es similar. Los autores del libro recuerdan que, al cierre contable de 2007, cinco de los principales seis bancos españoles: Santander, BBVA, Banco Popular, Banco Sabadell y Banesto poseían participaciones en sociedades radicadas en paraísos fiscales. El Grupo Santander, en el ejercicio 2007, tenía una fuerte presencia, a través de 33 sociedades, en varios paraísos fiscales como Jersey, la Isla de Man, Guernsey, las Islas Caimán y Bahamas, con un capital y reservas que rondaban los 5.000 millones de euros. A todo ello añadir sus sociedades radicadas en Panamá, Luxemburgo, Holanda y Suiza. Por su parte, BBVA cuenta con tres sucursales en Caimán y una en Antillas Holandeses, además de BBVA Panamá.

En cuanto a otras empresas españolas, el Registro de Inversores del Ministerio de Industria contabiliza 8.300 millones de euros en paraísos fiscales desde 2003, y todo ello sin tener en cuenta las sumas sin declarar.

Un informe del Observatorio de la Responsabilidad Corporativa prueba que 18 de las 35 grandes compañías nacionales que cotizan en el IBEX tienen sociedades participadas en paraísos fiscales, lo que muestra la alianza entre grandes empresas y fortunas con los paraísos fiscales para defraudar y delinquir.

Todo esto y mucho más encontrará en este libro valiente que nos ayuda a comprender quiénes son verdaderamente los dueños del mundo observando que ni instituciones internacionales, ni gobiernos actúan contra esa situación.

Antonio Romero y Miguel Díaz. “Costa Nostra. Las mafias en la Costa del Sol”. Atrapasueños editorial, 2009. Www.atrapasuenos.org

Rebelión ha publicado este artículo a petición expresa del autor, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Historia africana

Reseña del libro African History: A very Short Introduction, de John Parker y Richard Rathbone

Alexis Figueredo
Rebelión

Hoy en día, la vorágine que se nos ha impuesto a los seres humanos como forma de vida es cada vez más convulsa; a ello, hay que añadirle los mecanismos superfluos de entretenimiento que se han creado para "apaciguar" el estrés provocado por la dinámica social. En la actualidad, son cada vez más los seres humanos con menos tiempo disponible para el ocio y el recreo físico y espiritual; como también es cada vez mayor la contaminación diseminada en cuanto a la calidad de la recreación y el tiempo libre. Esta contaminación no es casual, todo lo contrario, ha sido creada con alevosía para mantener a la mayoría indiferente, apática ante la realidad que los absorbe y, sobre todo, desinformada. Es obvio que la cantidad de televidentes en el mundo es inversamente proporcional a la cantidad de lectores; de ahí que sea también cada vez mayor el segmento poblacional manipulable y orientado de una manera uniforme en el presente. Al sujeto, primero se le trivializa y después se le somete. Sin embargo, el sometimiento contemporáneo se ha vuelto placentero, seductor; se han creado mecanismos rigurosos para exacerbar los niveles de sadomasoquismo del Ser y, de esta forma, mantenerlos bajo una suerte de esclavitud placentera... apetecida. Ya gran parte de la gente no quiere pensar, y cuando lo hace es en función de las cifras; el individuo promedio de hoy prefiere gozar burdamente cuando dispone de algún tiempo libre, que regularmente es muy poco; se ha desarrollado un hedonismo antinatural y artificioso, vulgar y violento. Hoy día, el placer se ha degenerado abruptamente a través del consumo y su entorno.

Por todo lo anterior, hoy se hace imprescindible saber discernir, concretar, planificar y ajustar nuestro tiempo libre en aras de nuestra libertad individual. Aprender a 'salvarse', es una asignatura fundamental en estos tiempos de sofisticada incultura. Es por esto que muchos escritores, lectores, periodistas, formadores de opinión y hasta los prolijos académicos han captado el mensaje y han ajustado su estilo y su pluma al contexto actual. Hoy se hace necesario escribir e informar mucho y bien, pero en síntesis y a manera de breviario; pensando siempre en un lector de sinopsis, que yace agobiado por su realidad y secuestrado por la velocidad que le imponen.

El libro African History: A very Short Introduction (Ediciones Kindle, mayo 1, 2007), escrito por John Parker y Richard Rathbone, constituye el ejemplo perfecto de una excelente condensación histórica. Más de cinco milenios de la historia de un continente, comprimidos magistralmente en 165 páginas. Cultura, religión, conquista colonial, esclavitud y diáspora quedan resumidos en este importante libro. Los autores, han provisto y enriquecido este ejemplar con una magnífica colección de fotografías de archivo de un gran valor histórico. Jonh Parker es maestro de Historia Africana en la Facultad Oriental y de Estudios Africanos de la Universidad de London; es autor de Making the town: Ga State and Society in Early Colonial Accra (2000) y, junto a Jean Allman, escribió Tongnaab: The History of a West African God. Richard Rathbone es Profesor Honorario de Historia en la Universidad de Wales, Aberystwyth y Profesor Emérito en Historia de la Facultad Oriental y de Estudios Africanos; su obra incluye los libros Ghana (1992); Murder and Politics in Colonial Ghana (1993), entre otros.

Para los amantes de África, su cultura, su historia y vicisitudes este ejemplar les ofrecerá un conocimiento sustancial, escrito desde la esencia y el profundo conocimiento de dos autores consagrados al estudio de este gran Continente. African History: A very short Introduction, es un libro imprescindible para las bibliotecas de los hogares con arraigo africano; es un pequeño caudal que enriquecerá la cultura de todos los que se desvelan por las padencias del continente más vigoroso y, a la vez, más atropellado y maltratado de la Historia de la humanidad.

Nota: El libro no ha sido traducido aún al español.

Poeta y periodista independiente. Reside en EEUU. Diplomado por la Universidad de Miami en Communications (Public Speaking and Animation for Radio and Television). Ha publicado los poemarios Lienzos de Otoño (Ediciones Matsol, EEUU, 2002) e Imágenes al Éter (Editorial Gente Nueva, Bogotá, Colombia, 2006).

Rebelión ha publicado este artículo a petición expresa del autor, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

viernes, 9 de octubre de 2009

Una rigurosa investigación sobre el conflicto armado colombiano

Comentarios sobre el libro “Sangre y capital – La paramilitarización de Colombia”, de Jasmin Hristov

Luis Alberto Matta
Rebelión

Aún tibio llega a mis manos el libro “Blood & Capital – The Paramilitarization of Colombia” de la escritora canadiense Jasmin Hristov. En palabras de los editores “Ohio University Press” y Paula Brill de “Between the Lines”, y del académico e historiador de la Facultad de Ciencias Políticas de York University, David Mcnally, se trata de una de las más rigurosas investigaciones realizadas en los últimos años acerca de las complejidades, dinámicas y contradicciones del prolongado conflicto social y armado colombiano.

Hristov en su libro analiza objetivamente el conflicto colombiano, y lo define como una guerra que hunde sus raíces y razones en la injusticia, la exclusión social, la pobreza, la corrupción y la violencia política impuesta por las clases dominantes que controlan los hilos del régimen hace más de una centuria.

Pero el de Colombia es un pueblo rebelde, valiente y soñador, que siempre ha ofrecido resistencia popular, a lo cual el régimen ha respondido con escuadrones de la muerte, que de paso encubren la responsabilidad de la oligarquía en la sangrienta orgía de sangre y violencia con que la clase dominante se ha apoltronado en el poder.

Los poderosos en Colombia, más que en ningún otro país del hemisferio occidental, han acudido sistemática e ininterrumpidamente por sesenta años a los escuadrones de la muerte paramilitares para consolidar su poder mafioso y criminal basado en la injusticia. Pero sólo un presidente, y aquí Hristov da en el blanco, sólo Álvaro Uribe Vélez ha pretendido legalizarlos plenamente y otorgarles status político a cambio de silencio e impunidad, es decir, para que no denuncien a sus financiadores y promotores.

Los paramilitares que han roto este acuerdo de silencio e impunidad, o sea aquellos que han hablado más de la cuenta, fueron traicionados e inmediatamente extraditados a los EE.UU. para ser juzgados por narcotráfico, el embeleco moderno con que se cubren históricas realidades de injusticia y opresión.

De acuerdo con el libro de Hristov, pareciera que el afán del régimen, es decir de Uribe Vélez y su séquito más cercano (Juan Manuel Santos, Francisco Santos, Luis Carlos Restrepo, Eduardo Pizarro Leongómez, Fabio Valencia, Andrés Felipe Arias ó alias Uribito, y parlamentarios como Germán Vargas Lleras ó Mario Uribe entre otros) es silenciar ciertos crímenes. Aquellos que de acuerdo con la legislación internacional contra crímenes de lesa humanidad, no prescriben.

Entre los crímenes que esperan por verdad, justicia y reparación están la tortura, 30 mil desapariciones, miles de violaciones carnales, ejecuciones extrajudiciales ó falsos positivos, el genocidio contra la Unión Patriótica, el secuestro y asesinato de lideres sociales y sindicalistas, el desplazamiento forzado y robo de tierras contra 5 millones de campesinos, y otros 250 mil crímenes que más temprano que tarde serán juzgados por un gobierno popular, ó en su defecto por una corte internacional.

Jasmin no duda en señalar que la insurgencia también ha cometido infracciones contra el derecho internacional humanitario. Pero incluso de estas violaciones también es responsable el gobierno, primero por ser el garante constitucional de los derechos humanos de los colombianos, y segundo, por empeñarse en una guerra sin fin en contra de toda alternativa de solución política dialogada para el conflicto interno con la insurgencia, inclusive por oponerse y embolatar la posibilidad de un acuerdo humanitario con las FARC, que permita la libertad de los cautivos.

Este es un gobierno que negocia con los paramilitares, que negocia con los narcotraficantes, pero que se niega a dialogar y buscar alternativas de paz con la insurgencia guerrillera. Jasmin Hristov afirma sin rodeos que el diálogo entre los paramilitares AUC y el gobierno de Uribe, fue el diálogo de un sistema; fue parte de la estrategia de un sistema, y está integrado a la evolución de la estrategia paramilitar del Estado.

No es fortuito que una buena parte de la elite terrateniente, empresarial y política, incluso del clero y de las fuerzas militares y de policía en Colombia se hayan beneficiado del paramilitarismo (para encubrirse), y por ahí derecho del narcotráfico. No es accidental que ese segmento gamonal de la elite respalde unificadamente al actual presidente Uribe y su política de “seguridad democrática”.

Esa misma elite es la dueña de los medios masivos de información. La mass media colombiana ha desarrollado una campaña de miedo, a la vez posicionando al régimen mediante encuestas de opinión, que en últimas terminan manipulando a la población que no importando que viva entre la miseria y la muerte, acepta y aprueba la opinión falsificada de que la vida de los colombianos pobres, o sea la mayoría (25 millones en la miseria), es mejor que la vida de los suizos, los alemanes, los japoneses ó los canadienses. Como dice burlonamente el vicepresidente Santos: Colombia es el país más feliz del planeta.

La información que emiten los medios es parte de esa violencia política que calculadamente desarrolla el régimen. Esa violencia tiene también manifestaciones terroristas como son la estrategia del desplazamiento forzado para apoderarse de la tierra amansada por los campesinos y colonos (en palabras del sociólogo Alfredo Molano), los crímenes selectivos de líderes barriales, de sindicalistas, defensores de derechos humanos, de lideres estudiantiles, de voceros campesinos, negros ó indígenas, así como las masacres que apuntan a desintegrar redes organizativas y sociales de las comunidades.

La investigadora canadiense Jasmin Hristov en su libro “Blood & Capital” pone su mirada crítica, descifrando de manera organizada y sencilla la conexión íntima entre estas violencias y los intereses de las corporaciones financieras, compañías mineras, bananeras y de palma africana. Por eso su fascinante análisis aborda las razones para querer imponer los tratados de libre comercio. Uribe sabe que la firma de estos tratados significa respaldo para su régimen de oprobio e impunidad.

Hristov documenta el rechazo organizado y pacífico de las comunidades de base contra los tratados de libre comercio. Y analiza la tragedia humanitaria que han generado operaciones paramilitares para desalojar comunidades de territorios que luego han sido o serán entregados a corporaciones mineras transnacionales, o entregados a compañías agroindustriales (banano y palma africana) de capital colombiano y extranjero.

Son los ricos los que están quemando el planeta

Basta de culpar a los pobres

George Monbiot
The Guardian

El crecimiento de la población no es un problema -se produce en que consumen menos. Entonces, ¿por qué nadie acusa a los súper-ricos? No es una coincidencia que la mayoría de los que están obsesionados con el crecimiento de la población, son personas blancas que ya se les ha pasado el arroz: es por lo único que no pueden ser acusados. El brillante científico de los sistemas de la Tierra, James Lovelock, por ejemplo, dijo el mes pasado “Aquel que no vea el crecimiento de la población y el cambio climático como dos caras de la misma moneda son o ignorantes o se esconden de la verdad. Estos dos enormes problemas medioambientales son inseparables y discutir uno, ignorando el otro es irracional”. Pero es Lovelock quien está siendo ignorante e irracional.

Un informe publicado ayer en la revista Environment and Urbanization muestra que los lugares donde la población ha estado aumentando más rápido son aquellas en que las emisiones de dióxido de carbono han aumentado más lentamente y viceversa. Por ejemplo entre 1980 y 2005 el África Sub-Sahariana produjo el 18,5% del crecimiento global de la población y sólo el 2,4% del aumento de CO2. En América del Norte hubo un aumento del 4% de población pero un 14% en las emisiones. El 63% del aumento de población ha ocurrido en lugares con muy bajas emisiones.

Incluso estos datos no capturan toda la esencia. El informe dice que una sexta parte de la población es tan pobre que no produce emisiones. Éste coincide con ser el grupo con un aumento mayor de población. Los hogares en India que ganan menos de 3.000 rupias al mes (45€) usan una quinta parte de la electricidad por cabeza y una séptima parte del combustible para el transporte de los hogares que ganan 30.000 rupias o mas. Los que no tienen techo casi no utilizan nada. Aquellos que viven de procesar residuos (una gran proporción de los sin-clase urbanos) a menudo ahorran más gases de efecto invernadero de los que producen. Muchas de las emisiones por las que los países pobres son culpados deberían por justicia pertenecer a los países desarrollados. La quema del gas de las compañías exportadoras de petróleo desde Nigeria ha producido más emisiones de gases con efecto invernadero que todas las otras fuentes en el África sub-sahariana junta. Incluso la deforestación en los países pobres está conducida principalmente por operaciones comerciales para traernos madera, carne y pienso para el ganado para alimentar a los consumidores ricos. Los habitantes rurales pobres hacen incluso menos daño.

El autor del informe, David Satterhwaite, señala que la vieja formula enseñada a los estudiantes de desarrollo (I=PAT) es errónea*. El impacto total debería medirse como I=CAT: consumidores por la riqueza por la tecnología. Gran parte de la población mundial utiliza tan poco que ni siquiera se verían reflejados en esta ecuación. Son los que tienen más hijos.

Cuando existe una correlación muy débil entre el calentamiento global y el crecimiento de la población, hay una correlación fuerte entre el calentamiento global y la riqueza. He estado estando un vistazo a unos cuantos súper-yates, ya que necesitaba algo para entretener a los ministros laboristas al estilo que están acostumbrados. En primer lugar, estudié los planes para la Flota de Royal Falcon RFF135, pero cuando descubrí que solo quemaban 750 litros de combustible por hora me di cuenta que no iba a impresionar a Lord Mandelson. Puede que levante un poco las cejas en Brighton con el Overmarine Manguita 105, que quema 850 litros por hora. Pero lo que de verdad me impresionó fueron los Yates Wally en Mónaco. El Wally Power 118 (que da una sensación de poderío) consume 3.400 litros por hora navegando a una velocidad de 60 nudos. Es casi un litro por segundo o 31 litros por kilómetro.

Por supuesto, para hacer una verdadera impresión debo gastarme una pasta en accesorios de madera de teca y de caoba, llevar unas cuantos motos acuáticas y un mini-submarino, llevar a mis invitados al puerto en un avión privado o en helicóptero, ofrecerles atún, sushi y caviar de beluga y pilotar la bestia tan rápido que aplaste la mitad de la vida marina en el mediterráneo. Como propietario de uno de esos yates infligiré mas daño a la biosfera en 10 minutos que la mayoría de africanos durante todas sus vidas.

Alguien que conozco que socializa con los súper-ricos me dice que en la zona de la ribera baja del valle del río Tamesis vive la gente que calienta sus piscinas descubiertas a la temperatura de las bañeras durante todo el año. Les gusta estar tumbados en sus piscinas en las noches de invierno contemplando las estrellas. El coste del combustible es de 3.000£ al mes. 100.000 personas viviendo como estos se cargaran nuestros sistemas de apoyo de vida más rápido que 10.000 millones de personas viviendo como los agricultores africanos. Pero al menos los súper ricos tiene la buena costumbre de no procrear demasiado, por lo que los ricos viejos que se quejan de la súper-población les pueden dejar tranquilos.

El pasado mes de Mayo el Sunday Times publicó un articulo titulado "Billionaire club in bid to curb overpopulation". (Club de millonarios para reducir la sobre-población) Decía que “algunos de los más millonarios de Estados Unidos se han reunido secretamente” para decidir que buena causa apoyarían. “Se llego a un consenso: apoyarían una estrategia en la que el aumento de la población seria tratado como una potencial amenaza ambiental, social e industrial.” En otras palabras; Los ultra ricos han decidido que son los más pobres los que están destrozando el planeta. No esperes una metáfora, es imposible satirizarlo.

James Lovelock como Sir David Attenborough y Jonathan Porrit, patrocinan Optimum Population Trust (la fundación para la población óptima). Es una de las docenas de campañas y fundaciones cuyo sólo objetivo es desaconsejar a la gente que tenga hijos en nombre de salvar la biosfera. Pero no he sido capaz de encontrar una sola campaña con el único objetivo de exponer los impactos de los súper ricos.

Los obsesionados pueden decir que la gente que tiene muchos hijos puede que un día sean ricos. Pero ya que los ricos cada vez se apoderan de más y más, los recursos se están acabando y esto para la mayoría de los más pobres, es una perspectiva poco halagüeña. Hay importantes motivos sociales para ayudar a la gente a controlar la natalidad, pero pocos motivos ambientales- excepto entre las poblaciones ricas.

La Optimum Population Trust pasa por alto el hecho de que el mundo está en una transición demográfica: el ritmo en el aumento de la población se están reduciendo casi en todas partes y según Nature el numero de personas es muy probable que alcance un máximo en este siglo, aproximadamente 10.000 millones. La mayor parte del crecimiento se producirá entre aquellos que casi no consumen nada.

Pero nadie anticipa una transición en el consumo. La gente tiene menos hijos al ser más rica, pero no consumen menos- consumen más. Como muestra los hábitos de los súper ricos, no hay límites para el despilfarro. Se espera que el consumo aumente con el crecimiento económico hasta que la biosfera diga ya basta. Cualquiera que comprenda esto y todavía considere la población y no el consumo como el gran tema está, según palabras de Lovelock “escondiéndose de la verdad”. Es el peor caso de paternalismo, culpar a los pobres por los excesos de los ricos.

Entonces, ¿dónde están los movimientos de protesta contra los apestosos ricos que están destruyendo nuestros sistemas de vida? ¿Donde está la acción directa contra los súper-yates y los aviones privados? ¿Donde esta la guerra de clases cuando se necesita?

Es hora que tengamos las agallas de nombrar el problema. No es sexo, es el dinero. No son los pobres, son los ricos.

Traducido por Félix Nieto para Globalízate
http://www.globalizate.org/monbiot041009.pdf

Artículo original

Stop blaming the poor. It's the wally yachters who are burning the planet

Population growth is not a problem - it's among those who consume the least. So why isn't anyone targeting the very rich?

George Monbiot en The Guardian- Lunes 28 Septiembre 2009
http://www.guardian.co.uk/commentisfree/cif-green/2009/sep/28/population-growth-super-rich

Notas del traductor:

*La fórmula describe el impacto de la actividad humana en el medio ambiente, fue desarrollada en la década de los 70 en un debate entre Barry Commoner, Paul R. Ehrlich and John Holdren. I = P × A × T

Impacto humano (I) en el medio ambiente es igual al producto de la población (P), prosperidad (A: consumo per capita) y tecnología (T: impacto ambiental por unidad de consumo)

http://en.wikipedia.org/wiki/I_PAT

He traducido wally yatches como ricos en el título ya que la traducción yates wally no es muy sugerente, aun así he buscado el significado y se refiere a una compañía que diseña y fabrica yates de altas prestaciones, basada en Montecarlo y fundada en 1994 por Luca Basanni. http://en.wikipedia.org/wiki/Wally_Yachts


George Monbiot
The Guardian